Trabajos de reformas habituales en la vivienda nueva
Más allá de los trabajos de actualización, habituales en las viviendas de segunda mano, existe un cada vez más frecuente, movimiento y demanda de trabajos de reformas en las viviendas de primera mano. Según un estudio de una importante inmobiliaria a nivel nacional, hasta un 68% de las personas que adquieren este tipo de viviendas, están interesadas en la mejora o cambio de alguna de las estancias de su casa o piso. Las dos estancias, que se reforman de forma más habitual son las cocinas y los cuartos de baño.
En los cuartos de baño, una de las principales razones para se desarrollen estos trabajos de reformas, es debido a la baja calidad de los materiales empleados, por parte de las constructoras en las reformas. Por ejemplo, es habitual que los sanitarios que se emplean sean los más básicos y muchas veces faltan complementos siempre necesarios como mamparas de duchas, muebles de baño o accesorios. Esto hace a los propietarios, a decidirse por una reforma más profunda de estos espacios es los que incluso se aprovecha para realizar un cambio en el alicatado de suelos y paredes. De esta forma, es habitual que se desarrollen servicios de reformas integrales de baños, muy próximos a los que se pueden realizar en viviendas de segunda mano.
En el caso de las cocinas, la principal causa para realizar un trabajo de actualización en ellas, es que hasta el 50% de las viviendas nuevas, son entregadas sin muebles de cocina ni electrodomésticos. Por ello, muchos de los propietarios aprovechan estos trabajos para realizar otros complementarios, como por ejemplo mover tomas de agua y eléctricas, para de esta forma poder configurar las cocinas acordes a sus preferencias personales, sin las limitaciones de partida. Muchos de los clientes, incluso se plantean realizar otros servicios similares a una reforma integral de cocina, tirarando muros, cuando técnicamente es posible, para unir las cocinas a otras estancias de la vivienda como los salones, unificando espacios y creando zonas más amplias y luminosas.
A través de estas actuaciones y otras de menor envergadura, como el cambio de suelos, puertas o ventanas, los clientes de viviendas de nueva construcción pueden dar los últimos detalles a sus viviendas permitiendo que las mismas encajen de forma perfecta en el estilo de vida y preferencias de sus propietarios. Por ello, es cada vez más habitual ver a trabajadores entrando a ejecutar trabajos en este tipo de inmuebles, algo que hace años era raro y casi anecdótico.
