Cuidando su Bienestar Mental: Estrategias de Prevención
Todas las enfermedades necesitan medidas preventivas. Los trastornos mentales no son una excepción.
La prevención de los trastornos mentales puede ser primaria o secundaria. Así, la prevención primaria pretende evitar la aparición de un trastorno de enfermedad, mientras que la prevención secundaria pretende evitar la reaparición de un trastorno mental. También debe vigilarse la salud mental de las personas en remisión.
Factores de riesgo al trastorno mental
Factores que con mayor probabilidad preceden y disponen a los trastornos mentales.
Factores causales internos:
predisposición hereditaria;
trastornos inmunológicos del organismo;
trastornos bioquímicos (por ejemplo, la disminución del colesterol en la sangre hace que el organismo deje de producir una hormona especial responsable de la tolerancia al estrés);
Trastornos del desarrollo del niño durante el embarazo de la madre y trastornos del desarrollo que se manifiestan en la primera infancia (hasta los tres años);
enfermedades somáticas de los órganos internos, que provocan supresión del cerebro;
daños cerebrales.
Factores externos de alto riesgo:
traumatismo cerebral
infección del sistema nervioso central;
intoxicación;
contaminación del organismo por elementos radiactivos;
estrés emocional crónico agudo (es decir, situaciones estresantes continuas y prolongadas en el trabajo, relacionadas con el estado de salud, la situación familiar, etc.).
Manifestaciones de los trastornos mentales
La sintomatología de los trastornos mentales es variada y polifacética en cada caso concreto. Las manifestaciones más comunes son las siguientes:
Aumento de la sensibilidad a determinadas sensaciones: luz, sonido, tacto;
Disminución de la sensibilidad a los estímulos externos (pérdida de interés);
Ilusiones (percepción errónea del mundo circundante) y alucinaciones (percepción de objetos y fenómenos inexistentes - oír sonidos, ver acciones, etc.)
Aumento o, por el contrario, deterioro significativo de la memoria;
Amnesia (pérdida de memoria total o episódica, los llamados lapsus);
Rápido desorden de pensamientos o, por el contrario, pensamiento retardado, fijación en el problema;
Trastornos compulsivos (incluyendo fobias de varios tipos, miedos, preocupación constante y dudas)
delirios (ideas falsas dolorosas e injustificadas que no se pueden disuadir)
diversos estados depresivos (percepciones pesimistas del mundo y de la propia vida)
afecto maníaco (aumento injustificado y doloroso del estado de ánimo);
Cambios frecuentes del estado de ánimo en un breve periodo de tiempo sin que haya motivo para ello;
apatía (falta total de interés por la vida o cualquier emoción).
Métodos de prevención de los trastornos mentales
El método más fiable es diagnóstico oportuno y correcto, y posterior tratamiento de diversos tipos de enfermedades somáticas e infecciosas del organismo que pueden afectar a la salud mental de una persona.
Medidas de intervención temprana.
Medidas para cuidar su salud física.
Evitar el consumo de alcohol.
Medidas para prevenir el envenenamiento químico del organismo (eliminación del abuso de sustancias, la drogadicción y otras adicciones).
Comunicación regular con las personas cercanas.
Evitar los conflictos y las situaciones estresantes.
Combatir el estrés y la ansiedad con medidas farmacológicas (por ejemplo, el uso de sedantes suaves si es necesario).
Mantener un estilo de vida saludable, abandonar los malos hábitos, desarrollar nuevos intereses, aficiones y hobbies.
Regular sueño.
Acciones de prevención en salud mental y tratamiento en remisión
Las medidas preventivas y terapéuticas de los trastornos mentales son similares en muchos aspectos: lo que protege contra el desarrollo de los trastornos también puede utilizarse para autocuidado y el tratamiento de la enfermedad que ya se ha desarrollado. En la terapia y la prevención pueden utilizarse distintos enfoques: técnicas centradas en la persona dirigidas a mejorar la capacidad del individuo para hacer frente al estrés ambiental mediante cambios en el comportamiento y las actitudes; medidas dirigidas a cambiar el entorno laboral (prevención de circunstancias adversas).
En primer lugar, es necesario asegurarse de que el paciente es consciente del problema y asume la responsabilidad adecuada de su trabajo, sus resultados profesionales, sus decisiones, acciones y cambios de comportamiento. El paciente debe participar activamente en el proceso terapéutico y cooperar con el terapeuta.
Los pacientes deben recibir información completa sobre su trastorno mental: las principales manifestaciones clínicas, los patrones de evolución, los factores predisponentes; los síntomas físicos observados y las medidas de control del estrés.
En las fases iniciales de la enfermedad, es necesario un buen y completo descanso con aislamiento total del trabajo. Se necesita la ayuda de un psicoterapeuta o psicólogo.
Se puede recomendar a los pacientes las siguientes medidas para prevenir el desarrollo de enfermedades mentales y aumentar la tolerancia del organismo al estrés:
Descanso regular, equilibrio entre trabajo y vida privada. Los síntomas aumentan cuando los límites entre el trabajo y el hogar empiezan a difuminarse y el trabajo ocupa gran parte de la vida. Es necesario disponer de tardes y fines de semana libres (no llevarse trabajo a casa).
Ejercicio regular (al menos 3 veces por semana durante 30 minutos). Debe explicarse al paciente la necesidad de hacer ejercicio como forma de liberar la energía acumulada como consecuencia del estrés de interactuar con el entorno. Hay que buscar actividades que el paciente disfrute (caminar, correr, bailar, montar en bicicleta, jardinería, artesanía, etc.), ya que de lo contrario las percibirá como rutinarias y las evitará.
El sueño adecuado como factor más importante para reducir el estrés. Pregunte a los pacientes cuánto tiempo suelen dormir y cuánto necesitan para despertarse descansados (de 5 a 10 horas, una media de 7-8 horas). Si se observa un sueño insuficiente, puede ser aconsejable acostarse 30-60 minutos antes y controlar los resultados al cabo de unos días. Se considera que se duerme bien cuando las personas se despiertan descansadas, se sienten con energía durante el día y se despiertan fácilmente por la mañana cuando suena el despertador.
Hay que crear y mantener un "entorno de trabajo saludable", en términos de orden en la planificación, urgencia de las tareas, gestión del tiempo, etc. Organice su propio trabajo: las pausas cortas y frecuentes (por ejemplo, 5 minutos cada hora) son más eficaces que las pausas poco frecuentes y largas. Es mejor prepararse un desayuno ligero para trabajar que pasar hambre todo el día y comer en exceso por la noche. El ejercicio es bueno para los usuarios de ordenador.
Explicar la necesidad de delegar responsabilidades (compartir la responsabilidad del rendimiento con clientes, estudiantes, pacientes). Desarrollar la capacidad de decir "no". Las personas que mantienen la postura de "para hacer algo bien, tiene que hacerlo su mismo" se dirigen directamente al "burnout".
Tener aficiones (deportes, cultura, naturaleza). El paciente debe ser consciente de la necesidad de tener aficiones fuera del trabajo para aliviar el estrés laboral. Preferiblemente, los pasatiempos deben brindar la oportunidad de relajarse y desconectar (por ejemplo, pintar en lugar de correr carreras de coches).
En el trabajo con pacientes en terapia individual o de grupo, se pueden seguir las siguientes áreas para mejorar el bienestar emocional:
Entrenamiento en habilidades de comunicación. Entrenamiento en habilidades interpersonales eficaces. Identificación y ampliación de las relaciones interpersonales significativas para el paciente (familia, amigos, compañeros).
Una forma positiva de ver las cosas. Hay que ayudar al paciente a darse cuenta de que hay muchas maneras de interpretar una situación dada. La respuesta a la pregunta "¿Está el vaso medio lleno o medio vacío?" depende de la forma de ver las cosas: para los optimistas el vaso está lleno, aunque medio lleno, para los pesimistas está vacío. Junto con el paciente, podemos revisar la situación estresante y buscar los aspectos positivos. Esto no cambiará la situación, pero permitirá ver las cosas de otra manera (terapia racional-emocional).
Prevención de la frustración (reducir las falsas expectativas). Si las expectativas son realistas, la situación es más previsible y se gestiona mejor. La elección consciente de una profesión, el conocimiento de las dificultades asociadas a ella, una evaluación realista de las propias capacidades pueden ayudar a evitar el "burnout" o a suspender significativamente su desarrollo.
Entrenamiento de la autoestima. Las personas que sufren el síndrome de burnout suelen tener baja autoestima, son tímidas, ansiosas e inseguras. Se puede utilizar la técnica de la "tienda mágica". Se ofrece al paciente imaginar que está en una tienda de magia donde puede conseguir cualquier rasgo personal que le falte: probárselo, cogerlo para sí mismo.
Relajación muscular progresiva (método Jacobson). Los ejercicios son fáciles de aprender en grupo o de forma independiente. El objetivo principal del método es lograr la relajación voluntaria de los músculos transversos estriados en reposo. Las sesiones duran hasta 30 minutos;
Meditación trascendental. La meditación se refiere a una situación creada artificialmente en la que una persona se dedica deliberadamente a mejorar sus procesos de pensamiento o algunos rasgos mentales reflexionando sobre las circunstancias artificiales que ella misma ha creado;
Entrenamiento autógeno (método Schultz): relajación autoinducida o trance hipnótico;
La autohipnosis (método de Kue) permite suprimir las percepciones dolorosas y perjudiciales y sustituirlas por otras útiles y beneficiosas. Puede utilizarse para reducir el estrés antes de reuniones importantes
Mantener una discusión tras un acontecimiento crítico. La discusión es una oportunidad para expresar pensamientos, sentimientos, asociaciones causadas por un incidente grave. Este método se utiliza mucho en el extranjero en las fuerzas del orden. A través de la discusión tras un suceso traumático (persecución, tiroteo, muerte), los profesionales se deshacen de sentimientos persistentes de culpabilidad, reacciones inadecuadas e ineficaces y pueden seguir trabajando (por ejemplo, de servicio).
Varios investigadores también consideran que la religiosidad es un factor preventivo contra los trastornos mentales a lo largo de la vida. La religiosidad está asociada a la longevidad y se relaciona negativamente con la drogadicción, el alcoholismo, los pensamientos suicidas, los niveles de depresión y el divorcio.
Puede utilizar un servicio de telepsiquiatría para mantenerse en contacto con su médico en todo momento y obtener ayuda profesional. La telepsiquiatría es un tipo de telemedicina. Está pensada para la prevención y el tratamiento oportuno de enfermedades mentales y para el seguimiento de pacientes en remisión. Dado que el seguimiento sanitario a distancia de los pacientes se lleva a cabo en la vida cotidiana, en condiciones emocionales y físicas normales, puede proporcionar una imagen aún más precisa del estado de una persona que un examen en un ambulatorio.
Ventajas de la telepsiquiatría
El coste de los servicios, la lejanía y escasez de especialistas y la persistencia de actitudes negativas hacia el tratamiento de los problemas de salud mental (estigma) figuran entre las barreras más citadas para acceder a los profesionales de la salud mental. La telepsiquiatría puede ayudar a superar algunas de las barreras de acceso al tratamiento.
La telemedicina puede reducir el coste de la atención de salud mental: los pacientes no tienen que preocuparse por los desplazamientos, el cuidado de los niños, las horas de trabajo perdidas y otros problemas asociados a la visita a la consulta de un especialista alejado. Esta tecnología puede proporcionar atención de salud mental de calidad en cualquier clínica, incluidas las rurales, con conexión a Internet. La estigmatización de la salud mental suele disuadir a la gente de buscar ayuda, pero la telemedicina puede ponerla a disposición de quienes se sientan incómodos visitando la consulta de un psiquiatra.
La privacidad es una preocupación para cualquiera que utilice Internet. El temor a tener que cumplir la normativa en este ámbito ha disuadido a muchas organizaciones de embarcarse en servicios de telemedicina. Afortunadamente, para iniciar la telepsiquiatría no es necesario hacer grandes inversiones en dispositivos de seguridad de red adicionales ni en costosos equipos de videoconferencia. La mayoría de los centros médicos modernos ya cuentan con la infraestructura necesaria y, además, existen en el mercado sistemas informáticos que permiten la integración con el sistema de historia clínica electrónica existente.
Incluso hay personas para las que la telemedicina puede ser preferible al contacto cara a cara con un médico, por ejemplo personas con autismo o trastornos graves de ansiedad. Los pacientes con discapacidades físicas pueden encontrar la telemedicina especialmente útil.
Durante últimos añosla telepsiquiatría ya ha demostrado ser especialmente eficaz en el tratamiento del trastorno de estrés postraumático, la depresión y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad.
Técnicas digitales para el diagnóstico y tratamiento de ciertas enfermedades mentales
Neuronetics ha desarrollado el dispositivo terapéutico NeuroStar para el tratamiento de la depresión bipolar, que recientemente ha obtenido la calificación de "tecnología innovadora" en Estados Unidos. NeuroStar es una forma no invasiva de neuromodulación que utiliza pulsos magnéticos para estimular zonas del cerebro inactivas en la depresión. Actualmente es el primer dispositivo de EMT para tratar la depresión bipolar en pacientes adultos con trastorno bipolar que no han obtenido una mejoría satisfactoria con las terapias farmacológicas anteriores, a la espera de salir al mercado en breve.
MyCoachConnect, una aplicación de voz interactiva que utiliza inteligencia artificial, es capaz de monitorizar el estado clínico de pacientes con enfermedades mentales graves analizando sus muestras de habla. La aplicación se ha probado con éxito en un estudio en el que participaron 47 personas en tratamiento por trastorno bipolar, esquizofrenia y trastorno depresivo mayor. Según los investigadores, en salud mental, el uso de palabras específicas, incluidas emociones negativas o positivas, así como palabras específicas en primera persona se asociaron con estados depresivos y exposición a sucesos traumáticos.
Especialistas del Centro Médico de Cambridge han desarrollado una solución para controlar a distancia la progresión de la enfermedad de Parkinson. La plataforma informática nQ Medical está diseñada para caracterizar las deficiencias de la motricidad fina mediante el análisis de la interacción con teclados táctiles y dispositivos sensoriales en adultos con enfermedad de Parkinson o sospechosos de padecerla. El sistema está diseñado para monitorizar a distancia el estado del paciente las 24 horas del día, así como para medir la progresión de la enfermedad y el impacto de la terapia. Esto es muy importante, ya que hoy en día sólo se les monitoriza regularmente una o dos veces al año. La monitorización continua y la medición adecuada del efecto del tratamiento pueden ofrecer oportunidades significativas de mejorar los resultados de los pacientes.
Desarrollada por la empresa sueca Flow, la aplicación del mismo nombre se recomienda ahora en el sistema sanitario británico para reducir los síntomas de la depresión. Tras descargar Flow, los pacientes son remitidos a un médico virtual que mantiene conversaciones de chat diarias con los usuarios, ofreciéndoles terapia conductual personalizada, seguimiento del estado de ánimo y vídeos sobre condiciones específicas que han demostrado reducir los síntomas de la depresión, como la nutrición, el ejercicio y el sueño. La aplicación Flow funciona junto con los auriculares Flow. Utiliza la estimulación cerebral transcraneal DC para estimular partes específicas del cerebro y restablecer el equilibrio de la actividad. Es decir, funciona enviando una débil corriente eléctrica a las zonas frontales del cerebro. El resultado es un aumento de la actividad en el lado izquierdo del lóbulo frontal y una disminución de la actividad en el lado derecho del cerebro. El tipo de estimulación cerebral utilizado en los auriculares Flow se ha probado en ensayos clínicos. Los estudios han demostrado que dicha estimulación tiene efectos similares a los antidepresivos, pero con menos efectos secundarios y menos graves.
Conclusiones
La prevención en salud mental es fundamental: el cuidado y la atención temprana de la salud mental son aspectos clave para mantener un bienestar emocional óptimo. Adoptar estrategias de prevención puede ayudar a prevenir el desarrollo de trastornos mentales y promover una vida saludable. Si el paciente está en remisión, tanto él como sus seres queridos deben seguir vigilando atentamente su estado.
